Estreno en Córdoba, 5 de Mayo de 2005, Hoyts Patio Olmos, Gran Rex, Showcase

La voz del interior Córdoba miércoles 4 de mayo de 2005
ESPECTACULOS (tapa)
Entrevista a Mariana Arruti, directora del film “Trelew”
RAMIRO ORTIZ
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

LA HISTORIA EN PRIMERA PERSONA

La realizadora cuenta cómo filmó el documental sobre la masacre de presos políticos que se fugaron del penal de Rawson en 1972, que hoy se estrena en Córdoba
Mariana Arruti habla con convicción y con sentimiento. Está en Córdoba para presentar “Trelew”, el documental donde reconstruye una masacre tristemente célebre de la historia argentina, que dejó huellas profundas en toda una población: la que tuvo como víctimas, tras un intento de fuga parcialmente exitoso, a varios presos políticos alojados en el penal cercano a esa ciudad patagónica, en 1972. El filme (que en la noche del miércoles tuvo su avant premiere en el Cinelub Municipal, y hoy se estrena en los complejos Showcase, Gran Rex y Hoyts Patio Olmos ya fue elogiado en varios lugares del país y del mundo, pero la realizadora elije otro camino para hablar de él.
Con mucha claridad, en un pasaje de la charla, comenta que el suyo no es un documental “nostálgico” ni “pedagógico”- “No hay que explicar sino contar una historia – se explaya. Después, que los jóvenes vayan y lean, si quieren. Uno genera con la película la inquietud de saber, que vayan y aprendan”.
Casi al final de la entrevista, además, Arruti “confesará” que es muy fuerte para ella traer su documental a Córdoba. “Córdoba es el escenario de la rebelión-opina-Córdoba es el Cordobaza. Y el Cordobaza es determinante de tantas cosas en nuestro país. Y agrega : “En Córdoba estudiaron tantos de los que estaban en Rawson. Eran tantos los sindicalistas presos en Rawson, que la provincia y la ciudad de Córdoba son muy importantes para los que hicimos la película.
”No estamos mostrando la película en cualquier lugar. Siento un compromiso similar al que sentí en Trelew en ese sentido”
Lo que sigue es parte del diálogo que Arruti mantuvo con LA VOZ DEL INTERIOR:

-Es llamativa la cantidad de testimonios de primera mano que contiene el documental, incluso de personas vinculadas a las organizaciones revolucionarias armadas del los ´70
-Ese era el tema que más me preocupaba. Yo no quería hacer una película con una voz en off, con un narrador, historiador, experto ni nada de todo eso. Quería hacer una película contada en primera persona, al estilo “a mí me pasó”. No nostalgiosa, ni del recuerdo, sino que me contara la historia como si la estuviera viviendo. Para eso necesitaba armar un rompecabezas, buscando a todos los personajes que habían estado en cada momento y en cada situación. Y en la medida de lo posible desde los dos lugares, nó solamente los que estaban presos sino desde los guardias; no solamente los que estaban en la guardia sino también en la Marina. La Marina fue el gran personaje ausente de la película. Se intentó pero no se pudo contar con ellos.

- ¿Fue arduo dar con los demás enmtrevistados?
-Los personajes se fueron encontrando con mucha dificultad. Hace cuatro o cinco años ( nosotros empezamos en 2000 la investigación) era muy complejo, sobre todo en la zona de Trelew, hablar de Trelew, de lo que había ocurrido. La gente tenía mucho miedo. Conseguías un dato de alguien que te decía “Fulano vive en tal lugar, en esa casita rosa que vas a encontrar doblando la esquina”, y resulta que cuando llegabas ahí no le podías decir a esa persona quién te había dicho, porque te habían pedido que no lo hicieras. Con lo cual terminabas tocando el timbre y diciéndole al tipo: “Mire, yo no sé cómo llegué acá. La verdad que hace tanto que estoy con esto que no sé quién me dio el dato”. Eran situaciones difíciles para hacer una entrada con la gente. Yo me sentía una evangelista tocando los timbres. Y así fueron apareciendo.

Vínculo con la gente

Arruti da más detalles sobre el proceso: “En el casode la gente del pueblo –relata- periodista, médico, los guardiacárceles, en un 90 por ciento el primer contacto que se hizo con ellos obtuvo como respuesta un “No quiero participr; no quiero que me filmes; te puedo contar lo que quieras, pero no me pongas una cámara por delante. Y yo tenía que hacer una película. Lo que se hizo fue un trabajo bastante extenso de vínculo con la gente. De volver al lugar varias veces…. Entonces la gente se fue enganchando en el proyecto, y aceptando participar, de a poco”.
Uno de esos casos fue el de los taxistas cuyos móviles fueron utilizados por los presos para llegar desde el penal al aeropuerto de Trelew. Arruti tambien relata ese episodio: “Rubén, uno de ellos, dijo: “Yo no voy a dar testimonio de ninguna manera”. Y le caímos a la casa, con la camioneta llena de equipos, a los tres meses, le tocamos el timbre, y le dijimos: “Rubén, es ahora o nunca. Si querés estar, estás, si nó me voy, tengo todo en la puerta”. Y dijo que sí. Así hicimos la entrevista”.
“La historia de la masacre de Trelew ha marcado mucho a aquella gente. Han tenido miedo a la persecución. Quedaron lastimados”, explica Arruti.

El eco del compromiso

-¿El rodaje de la película sirvió para modificar ese miedo?

-Mucho. Sirvió de dos formas. A nivel individual, porque la gente por primera vez se animaba a hablar de esto, alguna quería pero le costaba comprometerse y decir, por esto del dolor. Nos pasó con la madre de Capello(uno de los muertos en la fuga), que no quería… Hasta que un día nos llamó por teléfono y nos dijo. “Yo tengo necesidad de hacerlo” Había algo de catarsis ahí. Lo mismo pasó con la tía de María Angélica Sabelli, Alicia Sanguinetti, que estaba presa en el penal.

-¿Algún otro efecto?

-Además de lo personal, creo que tuvo un efecto muy lindo en Trelew, y en Rawson. Porque lo que generó fue la posibilidad de empezar a hablar sobre lo que había pasado. Estaba muy tapado. No digo que haya sido sólo la película. El proceso histórico de los últimos años colaboró a eso. Cuando llegamos a filmar, de una negativa total pasaron a participar, y cuando llegamos con la película terminada, la sala se llenaba todos los días.Y cada vez iban más jóvenes. Iban los padres con los hijos a los que nunca habían hablado sobre el tema, y ahí tenían una herramienta como para poder hablar de algo que tenían atragantado hacía 30 años. Para los que hicimos la película fue una satisfacción muy grande, porque sentimos que la película había servido, había tenido un impacto de apertura en la zona.

-¿Cómo llegaste a los ex militantes, por ejemplo?

-Con los que habían estado presos en el penal no fue tan complicado hacer las entrevistas. Porque de última son militantes a los que les interesaba dejar un registro de lo que había ocurrido. La dificultad estaba más en el dolor de volver a vivir, narrando, otra vez eso. El reportaje más complejo fue el de Gorriarán Merlo, porque hubo que pedir autorización para entrar al penal de Devoto, donde estaba preso, para hablar con él. Tuvimos un año de tratativas y permisos para poder entra a filmar.
…..

Dos caras de una tragedia
¿Cómo repercutió el estreno en Trelew?
-Fue impresionante. Había un compromiso tan grande con la gente.
Uno hizo la película porque los demás aceptaron hacerla. La película se hizo porque la gente dijo que sí. Y además aparecieron nuevos personajes en el cine. Un día aparecieron las dos hijas del guardiacárcle muerto durante la fuga. Nunca imaginé que las hijas de este hombre iban a ir a ver la película. Y fue fuerte. Se acercaron, agradecidas de que la película cuente las cosas tal como fueron. Porque ellas manifestaron que ese es un episodio que en general no se cuenta mucho. Porque fue una macana. Ese guardiacárcel fue el único muerto durante la fuga. Los que se estaban fugando no querían que eso ocurriera, hubo un cuidado extremo para evitarlo. Pero bueno, pasó, y la película lo cuenta. Y también apareció otra gente en las proyecciones, gente que había hecho la colimba en la Base Naval, otros testigos. Lo que había costado tanto abrir, afloró cuando la película se estrenó.


La voz del interior Córdoba miércoles 4 de mayo de 2005
ESPECTACULOS
CINE COMENTARIOS

A un paso de policial

Para romper el mito del documental aburrido

Una virtud: el suspenso
Un pecado: no llegar a más público

No se equivoca ni un milímetro la directora Mariana Arruti cuando dice que, con , quiso hacer un documental que contara un episodio “como si se lo estuviera viviendo”


LA MAÑANA Córdoba jueves 5 de mayo de 2005
ESPECTACULOS (tapa)

Masacre Documentada

Se realiza hoy en el Cineclub Municipal la avant premiere de “Trelew”, la película de Mariana Arruti sobre los hechos ocurridos el 22 de agosto de 1972
En p. 3:

“Trelew", tan real que parece ficción

Esta noche a las 20.30 se realizará en el Cineclub Municipal “Hugo del Carril” el preestreno de la película “Trelew” de Mariana Arruti que, desde el jueves, también se verá en las salas comerciales.
Galardonada como Mejor Documental en el Festival de Cine Latino de Toronto, la Mención Especial del Jurado en el Festival de Cine Latino de Los Angleles, la mención Oficial del Jurado en el Festival de La Habana, el Premio Salvador Allende y Premio Videoamérica en el Festival de Cine Latinoamericano de Trieste y la Mención Especial Signis en el marco del Rencontres Cinemas Dámeriques Latine (Toulouse 2004), este documental reconstruye los hechos que, en 1972, terminaron con el fusilamiento de un grupo de presos políticos que habían sido enviados a la cárcel de Rawson.

La directora Mariana Arruti dialogó con LA MAÑANA sobre este documental, cuya estructura remite a un formato cercano al ficcional, que llevó cuatro años de trabajo.

-Cómo surge la iniciativa de abordar este fragmento de la historia argentina?
-Nosotros somos un equipo que ya veníamos trabajando en películas documentales: “Los presos de Bragado” dirigida por mí sobre el caso de tres presos anarquistas condenados a prisión perpetua. Hicimos otra película “Casa tomada” que no la dirigí yo sino María Pilotti quien ahora es la productora de Trelew, y también hice “La huelga de los locos”, una huelga naval anarquista. “Trelew” era un tema que siempre estaba ahí, como pendiente, posible de convertirse en un proyecto cinematográfico. A mí, particularmente me impactó la potencia que tiene esta historia: por un lado la implicancia política para los años posteriores de nuestro país, como inicio de un proceso que no se va a repetir por años y que tiene que ver con el terrorismo de estado, y por otro lado la historia como tal aque tiene tal fuerza que a medida que uno conoce a los protagonistas es como que no puede despegarse.. Creo que todo eso fue lo que generó esta gran necesidad de contarla.

-¿ Cómo fue el proceso de relevamiento histórico del hecho y de los peresonajes?
-Trabajamos en dos líneas: por un lado la visión histórica que tenía que ver con la investigación en soporte documental, para hacernos una idea de lo que queríamos contar; y por otra parte una línea de investigación tenía que ver con la búsqueda de los personajes. Esa tarea fue muy ardua, tanto por los personajes como por el material de archivo que necesitábamos.

-“Trelew “ es un documental o tiene componentes ficcionales?
- Es pura materia documental, pero está concebida como una película de acción, de suspenso, como un trhiller. Desde el montaje y la banda sonora se trató de reconstruir un relato que no fuera nostalgioso de los ´70, ni el recuerdo de lo que fue Trelew. Sino construir desde las voces de los protagonistas la historia tal cual como si estuviera sucediendo hoy. Esa fue la idea y en ese sentido, la película tiene como climas y estructuras más parecidas a un film de ficción.

- Estos personajes que participaron en Trelew ¿quiénes son y qué filiación tienen con los protagonistas de la historia?
-Los personajes se dividen como en grupos. Por un lado están los pobladores de Trelew, de Rawson, de Madryn, que son los que conformaron las comisiones de solidaridad para los presos políticos de Rawson. Algunos eran mlitantes y otros nó. Ellos se vinculan en principio con los familiares de los presos y después con todos ellos. Estos pueblos comienzan como a comprometerse con la vida política del país a partir de ese hecho. Después están los abogados de los presos, los guardiacárceles del penal. También personajes que en forma casual se vincularon con los presos como es el caso de un periodista de Canal 3 de Trelew, un médico, un empleado de la funeraria, un gendarme que había estado allí y que también hace su relato..

--¿ Cuánto tiempo llevó hacer “Trelew”?
-Unos cuatro años. Fue un trabajo difícil y además no teníamos dinero para terminarla. No sabíamos si íbamos a poder editarla pero seguimos investigando, mejorando el guión y cosas por el estilo….. La película comenzó a rodarse con la ayuda del gobierno de la Provincia de Chubut, de la Secretaría de Cultura de Trelew, y obviamente con nuestro aporte y el valiosísimo esfuerzo del equipo técnico que sabía que si alguna vez recibía una moneda cobraría y si no, nó. Por suerte la película después obtuvo el apoyo del INCAA, y eso nos permitió terminarla.

--Esta es una película que obtuvo varias distinciones en festivales internacionales. ¿Cómo vivieron ustedes a nivel personal y profesional esa repercusión ?
-Fue algo muy lindo, sobre todo porque uno puede viajar y conectarse con lo que genera esta producción en un público que no es argentino. De pronto estar sola en Toulouse, en Trieste o en Los Angeles, es maravilloso porque nos queda la sensación de que la película llega, aunque los espectadores no conozcan el contexto histórico. Es un producto que conmueve.

- ¿ Qué pasó cuando “Trelew” se estrenó justamente en Trelew?
-Bueno, la película se estrenó a nivel nacional en Trelew en mayo del año pasado y desde allí se inició una gira por toda la provincia. Fue algo impresionante, porque nosotros veníamos de tres años de trabajar en esa ciudad. El rodaje se fue haciendo en distintas etapas y el estreno fue como volver al lugar donde comenzó todo. Se generaron muchos vínculos en Chubut. Con muchos entrevistados nos seguimos viendo a lo largo de todo el rodaje. Fue como ir a devolver algo de todo lo que la gente nos había dado. Además cuando llegamos a Trelew, éste era un tema del que no se podía hablar. Era como maldito, se hablaba en voz baja, no se podía nombrar ni discutir. La primera sensación era de desconfianza, de miedo y la película de alguna manera abrió todo un camino nuevo y creo que ese clima fue el que se percibió en el estreno. Hubo una gran repercusión en el público, un público muy comprometido con la historia. Y creo que en Córdoba puede pasar algo similar, porque el Cordobaza envió al penal de Rawson muchísimos presos, y ese hecho fu un símbolo de la lucha y la rebeldía pero también el comienzo de una situación represiva en el país. Estrenarla en Córdoba era para nosotros una deuda pendiente.


Hoy día Córdoba jueves 5 de mayo de 2005
(doble página Magazine)
Cine
Mariana Arruti, directora de Trelew, habla de la película que hoy llega a los cines

MEMORIA DEL HORROR

por Martín Iparraguirre

(……..)HDC: Uno de los comentarios es que juega con la ficción…
MA: En realidad, está trabajada con una materia absolutamente documental, es decir que es una película que tiene entrevistas y material de archivo, pero es un documental que tiene una puesta desde la fotografía, desde el montaje, desde la banda sonora que intenta generar climas más ficcionales. Digamos que es un documental que tiene una estructura de thriller, de policial, tiene suspenso, tiene acción. Esto porque había una historia detrás que merecía ser contada con todos estos ingredientes en vez de ser recordada desde un lugar nostálgico de lo que ocurrió hace treinta años. Nuestra intención era ponerla en la pantalla como si estuviera ocurriendo hoy.(……..)


COMERCIO Y JUSTICIA
Buenos Aires jueves 5 de mayo de 2005

"El único personaje ausente de “Trelew” es la Marina"

(……..) la historia de Trelew aparece contada por sus protagonistas, con la ausencia obvia de la Marina responsable de las muertes, pero con las voces que reconstruyen la historia de nuestro país. Voces que no olvidan ni se callan, entre el aire de tanta desmemoria…. Yo creo que detrás de la cuestión política, detrás de la historia concreta de Trelew, que es una historia en sí misma muy cautivante y potente, a mí me interesó la cuestión humana de la época. Empezando por todo lo que estaba ocurriendo en el país, en un pueblito como Rawson, con un penal de máxima seguridad, donde habían organizado comisiones de solidaridad con los presos, en algunos casos militantes y en otros nó. Yo sentía que esa historia, que se había organizado alrededor del penal, mostraba un espíritu de la época, un compromiso con determinadas cosas, que creo que es, en definitiva, lo que me llevó a contar la historia. (……..)